PRIMER ANILLAMIENTO Y CONTROLES MALAGUEÑOS

 Ya han pasado dos semanas desde la última entrada, que han estado condicionadas por el trabajo y el poco tiempo libre. Por fortuna, otros han colaborado con nosotros,  y nos han llegado dos nuevos controles "europeos", en concreto de la provincia de Málaga. El primero nos lo hizo llegar Salvador García Barcelona, que observó el 11 de febrero a N:1TF en la playa de Fuengirola, un pollo anillado en nido el 17 de junio en el Parque del Mediterráneo, y que se había visto varias veces en el mismo lugar, la última el 26 de enero. Sin embargo, y a pesar del mal tiempo, decidió abandonar el idílico paraje del Parque y adentrarse en el Estrecho desafiando los temporales que hemos padecido durante esas semanas.

En esta piscina, vacía de agua, observé a N:1TF el 26/01/2014

   La otra observación nos llegó el domingo 23F, aunque se corresponde con una cita del 11 de enero, en la que José Sánchez Cordero controló a N:1UP en el Puerto de la Caleta de Vélez Málaga. Esta es la primera observación de este pollo volantón recogido por personal de Obimasa en el casco urbano y que se anilló y liberó el 15 de julio de 2013. Hasta ahora no había vuelto a ser visto.

   En lo que se refiere a las observaciones realizadas por nosotros, el 11 de febrero Miguel Angel observó totalmente coja a N:1RV, una gaviota que fue calificada por José Antonio Lapeña como "la más chula del barrio", ya que a mediados de julio ya se imponía a otros juveniles e incluso a aves adultas a la hora de disputar la comida. Esperemos que esa minusvalía no sea un obstáculo insalvable para su supervivencia.

N:1RV - 11/02/2014

  El resto de las anillas observadas en estas dos semanas han sido: N:1VM, N:1NJ, N:1PV, N:1UA y N:1PA (Plumitas).

  Para terminar, el sábado 22 de febrero me fui con mi hijo a la playa de Benzú a ver si conseguíamos capturar nuestra primera Larus michahellis del año, ya que hasta ahora no habíamos logrado que bajaran a la Estación de Anillamiento. Después de más de media hora de espera, las reidoras se atrevieron con el cebo, y poco a poco fueran alterando a las patiamarillas, que empezaron a llevarse hábilmente todos los trozos de comida que habíamos puesto encima de la trampa. Cuando ya apenas quedaban un par de pedacitos de carnada, una lucha entre dos ejemplares por ellos propició que una de ellas cayera en los lazos. Nuestro primer anillamiento del año, N:1WN.