En esta entrada voy a hacer una crónica de la visita que el domingo hicimos a la Sierra del Hauz, cadena montañosa que se extiende desde el Jbel Moussa hasta el Jbel Dersa, cerca de Tetuán, cuya cota más alta es el Jbel Hauz con 838 metros.
Aunque fueron muchos los atractivos de la excursión, y más teniendo en cuenta la presencia de biólogos especialistas en diversas materias, para nosotros, los amantes de la ornitología, los protagonistas de la jornada fueron los Colirrojos diademados (Phoenicurus moussieri), especie endémica del noroeste de África que hasta ahora no habíamos tenido la ocasión de observar. Fueron varias las parejas reproductoras que vimos en los alrededores de la pista por donde caminábamos, ocasión que aprovecharon José Antonio y Miguel Angel para fotografiarlos con todo lujo de detalles.
Las hembras son menos llamativas, pero muy bonitas también
Un ave abundante en este hábitat montañoso es la Chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax), residente reproductora en la zona.
Y para terminar con las aves, una foto de Curruca cabecinegra (Silvia melanocephala), otro de los insectívoros que estaban recolectando insectos para dar de comer a su prole.
Además de las aves, fueron muy interesantes la observaciones de especies vegetales en las que pocas veces nos fijamos, pero esta vez le prestamos más atención al ir acompañados por botánicos. A continuación fotos de algunas especies fotografiadas por José Antonio.
Murages (Anagallis arvensis)
Stachys fontquery
Jaguarzo
En definitiva, disfrutamos de una espectacular e inesperada jornada en un lugar totalmente salvaje, a muy pocos kilómetros de una capital como es Tetuán. Allí hasta ahora solo entran los pastores a pie o a lomos de sus mulas y se pueden ver caballos en estado semisalvaje.
Como podéis ver en estas fotos, llegados a un punto se acaban los caminos y todo es monte y piedra, realmente un lugar para disfrutar
Sin embargo... ¡No es oro todo lo que reluce! Desde hace menos de un año han empezado a explotar la riqueza mineral de este lugar, y han abierto una cantera que ya ha hecho desaparecer ¡¡¡Un monte entero!!!
Impresionante el destrozo que han realizado en poco más de nueve meses, a este ritmo este singular paraje tiene los días contados. No sé hasta que punto se podrá poner fin a esta barbarie, pero este ecosistema no podrá resistir mucho tiempo esta brutal agresión. Esperemos que los responsables de la administración marroquí sepan entender que este enclave merece seguir vivo, aunque mucho me temo que los intereses económicos prevalecerán sobre los ambientales... ¡En España ya tenemos experiencia en esos temas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario